Una pena, un edificio histórico que por la desidia de nuestros políticos en el gobierno municipal, han permitido dicha atrocidad.
De nada sirve que el partido que gobierna, enviase a sus sirvientes a la manifestación de hace unas semanas, si nada iban a hacer, pero a nuestro entender, quedaba "feo" que el resto de partidos políticos acudiese y ellos no.
Todo nuestro apoyo y nuestro afecto a los propietarios.
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